miércoles, 10 de diciembre de 2008
Disciplinas Ninjas
Taijutsu: combate desarmado. Se divide en Koshijutsu (golpeos a zonas sensibles) y Koppojutsu (rotura de huesos).
Kenpo/Ninja Ken: esgrima de sable, incluyendo el ninjato o shinobigatana.
Bojutsu: técnicas de lucha con los bastones de diversos tamaños.
Shuriken Jutsu: lanzamiento y empleo de láminas afiladas de metal.
Kusarigama: hoz japonesa con cadena y contrapeso en el extremo.
Yarijutsu: lanza
Naginatajutsu: especie de alabarda en forma de espada curva con asta muy larga.
Bajutsu: equitación y lucha a caballo.
Suiren: lucha y combate en el agua.
Kayakujutsu: fabricación y empleo de la pólvora y los explosivos.
Bo Ryaku / Kyojitsu Tenkan Ho: estrategia / formas de engaño intercambiando lo verdadero y lo falso.
Cho Ho: espionaje.
Shinobi Iri: ocultación.
Inton Jutsu: infiltración.
Henso Jutsu: caracterización, interpretación y disfraces.
Ten Mon: meteorología.
Chi Mon: geografía.
Seishin Teki Kyoyo: desarrollo espiritual.
Ninjutsu
El ninjutsu (忍術, ninjutsu), también conocido como shinobi-jutsu, es el arte marcial japonés del espionaje.
Su origen es milenario. Se piensa que se desarrolló originariamente en China y en Korea, donde se practicaba un arte muy parecido al ninjutsu, llamado sulsapara posteriormente pasar al Japón, concretamente a las regiones de Iga y de Koga.
Este arte marcial, o más bien el conjunto de sus prácticas marciales (consideradas clásicamente 18, como veremos más abajo) es el que han utilizado supuestamente los ninja durante siglos. Los primeros datos que se tienen de la utilización de ninja en el campo de batalla data del siglo V, lo que nos da una idea de la antigüedad de este estilo de lucha, que se complementaba con el aprendizaje de muchas habilidades útiles para el espionaje, como la caracterización o falsificación de documentos, así como ciertas prácticas esotéricas derivadas del Mykkyo, sistema espiritual japonés.
En el siglo XVI empieza su declive. Con la llegada de Oda Nobunaga, los ninjas fueron perseguidos y masacrados en un intento de detener su creciente influencia y poder. Aunque esto provocó que algunos clanes ninja se extendiesen por todo Japón al tener que huir de Iga. Ya en el siglo XVII se utilizaron por última vez de forma masiva en la revuelta cristiana de Kyushu en 1637.